LA VENGANZA COMO FORMA DE RENDENCIÓN
Thriller que recuerda al primer trabajo de los hermanos Coen, tiene como protagonista a Dwight (Macon Blair, de extraño parecido con Paul Giamatti) un hombre que vive como vagabundo hasta que es informado de la salida de prisión del asesino de sus padres, a partir de ese momento inicia un viaje para cobrar venganza por las afrentas del pasado. La cinta brilla gracias a su tensa puesta en escena y una contenida actuación de su actor principal, además ganó el FIPRESCI de la Quincena de Realizadores en Cannes 2013.
Un vagabundo lleva una vida tranquila en el bosque. Un día recibe una terrible noticia que cambia su vida: la policía lo busca para notificarle que el asesino de sus padres ha sido liberado de prisión. Toma su auto, sus pocas pertenencias y se dirige a la casa de su infancia, donde trata de proteger la vida de su hermana y sus sobrinas. Movido por el miedo y la venganza, se embarca en una atropellada lucha por vencer a los monstruos de su pasado, convirtiéndose en una especie de antihéroe al afrontar solo a toda la familia que intenta matarlo. Cinta de un humor que se basa en su singular carácter, y aunque trata sobre la venganza, no intenta glorificar la violencia ni justificarla.